PIDECO
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El Programa de Intervención en Delitos Económicos (PIDECO) es un programa de tratamiento propuesto en España durante el año 2020, y que se comenzó a aplicar en Enero de 2021. Se trata de un programa pionero en ese ámbito, ya que es el primer tratamiento a nivel mundial que está dirigido a personas condenadas por cometer este tipo de delitos. Anteriormente, no se habían propuesto otras modalidades de intervención para estos delitos, puesto que se consideraba erróneamente que las personas condenadas por delitos económicos no necesitaban de ningún tratamiento, ya que eran consideradas como personas que ya estaban reinsertadas.
ELABORACIÓN
Este programa ha sido creado por la Administración penitenciaria al haber apreciado un notable incremento de la población reclusa en lo referente a delitos económicos (delitos contra el patrimonio y contra el orden socioeconómico, delitos contra la hacienda pública y la seguridad social, delitos contra los derechos de los trabajadores, delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, delitos contra la ordenación del territorio y el urbanismo, la protección del patrimonio y el medio ambiente). El programa ha sido elaborado por un equipo de psicólogos especializados en la institución penitenciaria, y que gozaban de una previa experiencia en la aplicación de tratamientos. La elaboración se ha desarrollado en un período de aproximadamente 2 años, puesto que no había referentes previos y el COVID-19 hizo que esta situación se viese notablemente agravada.
OBJETIVOS Y FASES.
El objetivo que persigue este programa es la reeducación de los individuos sometidos al tratamiento, especialmente en lo referido a los factores personales y situacionales que ayudaron a que se produjese la comisión del hecho delictivo, además de proporcionarles una serie de herramientas que puedan aplicar en su posterior vida en libertad.
Con el fin de satisfacer ese objetivo y la reeducación de los sujetos, se propone este tratamiento formado por 32 sesiones. Las primeras estarán destinadas a lograr la motivación del sujeto que necesariamente ha de haberse presentado de forma voluntaria. Tras esta primera fase de formación, se seleccionaran aquellos internos e internar que hubiesen manifestado interés por participar, y en las sesiones posteriores se tratarán temas relativos a la identidad, al autoconcepto y a la autoestima. Además, en otras sesiones los profesionales trabajarán con los presos temas como las habilidades sociales, el narcisismo, el egocentrismo, el liderazgo, la humildad y la empatía.
Finalmente, se incluye la Justicia Restaurativa, donde el preso se encontrará con personas que hubiesen sufrido algún tipo de delito económico, tratándose tanto de víctimas directas como víctimas indirectas, que participarán siempre de forma voluntaria. Esta última fase, de gran importancia, se realiza con la finalidad de lograr que el penado se sienta responsable, pida perdón por sus actos y busque alternativas posibles para reparar el daño causado.